Este es un juego que heredé de mis hermanos mayores, y del que quizá nunca hayáis oído hablar. Se publicó entre los años 1978 a 1985, y hoy por hoy está descatalogado. Es un juego de mesa, de dos jugadores, para mayores de 12 años, y tal y como reza en su tapa, es una introducción a los wargames. (Y fabricado en Zaragoza, si es que ya no se hacen juegos como los de antes...)
El juego recibe su nombre de la batalla del Sinaí entre egipcios e israelíes durante la guerra de los seis días, un conflicto entre varias naciones árabes y el estado de Israel que tuvo lugar en 1967.
Su planteamiento es sencillo, cada equipo dispone de tres tipos de ficha: Doce soldados, seis tanques y tres cañones. Cada unidad tiene su movimiento marcado en hexágonos y su alcance. Cada hexágono de terreno tiene su valor en puntos de movimiento. (Por ejemplo, mover por montañas cuesta 2 puntos de movimiento, y por carretera solo 1/2)
Cada jugador tiene asimismo una ruleta de alcances en la que se indica que resultados hay que sacar en el dado para hacer daño por parte de un tipo de unidad a otra unidad según la distancia.
Es decir, vas girando la ruleta hasta que en el campo "ataque" aparezca la unidad que dispara, y en "defensa" aparezca la unidad objetivo. Por ejemplo, un tanque para disparar a un cañón a 4 hexágonos ha de sacar un seis. (Y no, no hay tiradas de salvación.)
Esta tirada se modifica con un -1 si se dispara desde una carretera a una duna o a una montaña, por ejemplo. La infantería, en vez de este modificador, simplemente no puede disparar desde determinados sitios a otros.
La secuencia de turno es sencilla, movimiento y después disparo. Gana la partida el que cumpla el objetivo de la carta que haya sacado, que consiste en ocupar el polvorín, el estado mayor o el oasis. (Solo hay tres cartas.)
Tengo recuerdo de haber jugado con él desde bastante pequeño, aunque me temo que al principio no sabía las reglas. Pero oye, lo que molaban los tanquecitos, los soldaditos y el mapa con ríos puentes y demás. Al abrirlo hoy he considerado un pequeño milagro que estuviesen todas las piezas.
Al verlo de nuevo, me llama la atención su sencillez y lo limpio de su sistema. En la misma ruleta de alcances tienes todas las reglas puestas en la parte de atrás. Y solo he necesitado cinco minutos para recordar como se jugaba, a pesar de que no lo he tocado en años.
Otra cosa llamativa es que en el sistema se percibe el esqueleto de las reglas de algunos wargames actuales. Muy simplificadas, eso sí, pero ahí están las bases de lo que jugamos ahora. Y el wargame este tiene más de treinta años.
Así que ya sabéis, si tenéis este juego en el trastero perdido, quizá sea el momento de quitarle el polvo.
Que viejos recuerdos, cuando me regalaron el Sinaí por navidades, tendría unos 12 años. Imagino que aún estará en casa de mi madre, encima de algún armario.
ResponderEliminarJajaja...Yo tambien me he tenido que subir a una silla para sacarlo, que lo tenía en un altillo.
ResponderEliminarMe parecen supergraciosas las unidades!. Y la foto de la caja es publicidad engañosa totalmente!
ResponderEliminarYo tambien he jugado al Sinai, fue mi primer wargame, que recuerdos
ResponderEliminarSi que somos viejunos si... y lo de la publicidad engañosa totalmente deacuerdo.
ResponderEliminarMolaba mucho el mapa celular en panal.
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