Cerrando la Banda de Frostgrave

Como ya os comenté en su momento, me hice una banda para el juego de Frostgrave de amazonas. Hace un tiempo también, tuve la oportunidad de probar la banda frente a Endakil en el inicio de una campaña. Para afrontar una campaña en Frostgrave creo que es esencial tener miniaturas de banquillo, para poder reponer bajas e invertir los tesoros que vayamos consiguiendo. Aquí están mis refuerzos.

Van a ser una arquera, otra secuaz, y una infantryman. Las tres miniaturas son referencias de la marca zaragozana Resina Planet, que el año pasado tenía buenas ofertas de black fryday.

Las miniaturas han sido fáciles de montar, pero no me han parecido sencillas de pintar. Ha sido un poco lo contrario de lo que me pasó con el resto de amazonas. La arquera es la figura de Vilborg the Viper, a la que he sustituido el estandarte por un arco de los Elfos Silvanos, y le he añadido un carjac en el suelo.

Vilborg

La infantryman es Pandora sun por la pose, parece que tiene dos espadas o una espada doble. Me he decantado por esta segunda interpretación, representando así la espada a dos manos que, según las reglas, han de llevar estas miniaturas.

Pandora.

Y la tercera es Ingrid Danzig, que con esa especie de sable, tomará el papel de thug. Con esto llegamos a la miniatura número 10: el máximo de miniaturas por banda que nos permite el reglamento. A partir de aquí habrá que mejorar las minis con equipo, o quizá subiéndolas de categoría.

Ingrid

Con la banda completa, solo me queda lanzar el reto a Endakil para la segunda partida, de la que al parecer, me toca preparar el escenario. Así que allá vamos:

Foto de familia. :D

"Laroc enjugó la frente de Sara mientras esta se revolvía en sueños. Lamentaba haber traído a su aprendiz a aquella lucha desesperada, y verla herida en aquel catre solo aumentaba su culpabilidad. Laroc lamentaba muchas cosas, pero no había tenido elección. Esbozo una mueca amarga: ¿Cuantas atrocidades se habían cometido por que alguien simplemente no había tenido elección?

- ¿Que ha pasado?- Murmuró Sara, mientras se trataba de incorporar. 

- Te hiriéron pequeña. Pero estás a salvo.-Respondió la maga, acariciando la cabellera pelirroja de la desafortunada aprendiz.

- ¿Y las demás?¿Están todas bien?- Volvió a preguntar la enferma dejándose caer exhausta.

- Si, tranquila. Niah y Kresa están heridas, pero se recuperaran. Las demás solo estamos un poco magulladas.

- ¿Kresa herida? Es imposible: está hecha de roca pura...- Bromeó Sara soltando una débil risita.

- Nos dieron fuerte pequeña, aunque luchamos bien- La mirada de Laroc trasmitió ternura por un instante. Tendida en el catre, Sara parecía solo una niña... 

- ¿Tuviste la visión maestra?

- La tuve. Pero fue una jugada arriesgada... tenía que dejar que ellas mirasen antes en el pozo, para poder ver lo que buscaban, lo que querían... y lo he visto.

- ¿Quienes eran esa maga de hielo y su aprendiz de fuego?¿Que buscan y porque luchamos contra ellas?- La voz de Sara trasmitía miedo y cierto cansancio.

Laroc y Sara.

- Cuando la ciudad maldita se cubrió de hielo, hubo una profecía: "De la estirpe de Felstad nacerán dos hermanas. La mayor manejara la nieve y el hielo, la menor gobernará la tierra y el fuego. La ciudad resurgirá, y el imperio retornará"- Laroc hizo una pausa.- Creemos que esas son las hermanas de la profecía. Son princesas de un reino al norte, fundado por hechiceros que huyeron de la Ciudad Maldita. Durante siglos su estirpe ha gobernado allí por derecho de sangre y magia. Ahora que Frostgrave se deshiela, volverán a levantar su imperio. Volverán las épocas en las que esclavos de todas las razas cruzaban el umbral de Felstad para no salir jamás. Nuestra gente y muchos otros sufrieron lo indecible: no podemos permitir que vuelva a pasar. 

- ¿Que buscan?

- Un libro, pero no un libro de hechizos. Algo mucho más peligroso: El códice de Arnaloth.

- ¿Un códice?- Sara la miró confusa.

- Un compendio maldito en el que se recogió toda la sabiduría sobre los artefactos mágicos de Felstad; a quien pertenecían, para que servían y donde se guardaban.- Laroc suspiró.- Pensabamos que el libro se perdió con la caída de esa maldita urbe, pero existe una copia. Y la visión nos ha dicho donde encontrarla. A ellas y a nosotras. Que objeto buscan hallar a través del códice es un misterio.

- No se hable más.- respondió Sara, incorporandose con dificultad.- Vamos a destruir ese libro.

- No temas pequeña..- Sonrió Laroc, a su pesar.- Iré yo. Tu descansarás de tus heridas. Te dejo con mi diario. Allí veras a donde nos dirigimos. Cuando te repongas, ven con Niah y Kresa. 

- Hablas como si supieses que vas a morir Maestra.- Sara la miraba preocupada.

- Ya has visto el poder de nuestras enemigas y la magia que usan. Mientras nosotras reconducimos las energias naturales con sutileza, ellas rasgan la realidad, materializando elementos imposibles. Son las semillas del terrible poder de Felstad. Si llegan a dominar su arte oscura, nada podra detenerlas. Pero no estamos solas: otros hechiceros de otras razas se opondrán a ellas. Los nombres de algunos están en mi diario. Si algo me ocurriese, acude a ellos.

- Si, Maestra.

- Adios Sara. Que volvamos a caminar juntas bajo el sol y las estrellas.

- Adios Maestra. Que volvamos a caminar juntas bajo la lluvia y la tormenta."